lunes, 18 de marzo de 2013

Prometeo Desafiando a Zeus

Prometeo Encadenado
Prometeo es conocido en la mitología griega como benefactor de la humanidad, hijo del titán Jápeto y la titánide Temis. El mito de Prometeo es uno de los más conocidos, no sólo había engañado a los dioses haciendo que recibieran la peor parte de cualquier animal sacrificado y los seres humanos la mejor (en una pila, Prometeo colocó las partes comestibles de un buey y las recubrió con el vientre del animal, en otra puso los huesos y los cubrió con grasas; al pedirle a Zeus que eligiese entre las dos, el dios opto por la grasa y se sintió muy disgustado al descubrir que esta cubría pila de huesos), sino que también había robado el fuego para entregárselo a los mortales. Prometeo roba el fuego telúrico, aquel que surge de los volcanes, de la forja de Hefesto, introduciéndolo en una caña. Por este acto es que Zeus lo castiga a permanecer eternamente encadenado a una roca del Cáucaso, que según Hesíodo, el padre de los dioses
queriendo destruir la raza humana y la había privado del fuego. Etimológicamente, el nombre del titán proviene de "Pro", antes y "Metheus", cuidado, previsor. Es Prometeo, que sacando a la humanidad en la oscuridad que se hallaba, ha traído el fuego que libera del miedo y permite el progreso. Asciende así a la categoría de un titán mártir que se enfrenta a un dios todopoderoso, arbitrario e injusto. "Por mi propia voluntad, por mi voluntad erré. No voy a negarlo. Por defender a los mortales, yo mismo encontré mis tormentos" (v. 266-267). Comete un error (hamartía) que se castiga con la tortura de soportar, parado en una desolada roca, los ataques continuos del águila de Zeus que le devora cada día el hígado el cual se vuelve a renovar durante la noche, y según la expresión de Esquilo, llega al saber a través de la experiencia dolorosa, necesaria para la adquisición de toda sabiduría. Pero, hay algo que Zeus no sabia y es que Prometeo conoce el destino.
 
 
 
 
Prometeo en el Caucaso encadenado a una roca y el aguila de Zeus torturandolo.

martes, 5 de marzo de 2013

Venganza de zeus

Hera quiere vengarse por su infidelidad y organiza una revolución con la ayuda de los demás dioses.

Consiguen destronarlo y encadenarlo mientras duerme. Zeus enfrenta el desafío más crítico de su vida, pero sus viejos aliados cien brazos acuden a ayudarlo y rompen sus cadenas haciendo que los dioses del olimpo huyan.

Zeus desea la venganza y distribuye graves castigos para los conspiradores, mientras su pueblo continúa viviendo en la inmoralidad, el crimen y hasta llegan a practicar el canibalismo.

Zeus quiere restablecer la justicia y la civilización entre los humanos y encolerizado provoca una gran inundación en la tierra como castigo para que todos sufran su ira y consiga erradicar el mal para siempre.

Los desastres naturales eran atribuidos a Zeus, dios del trueno y esta enorme inundación se relaciona con la historia bíblica de Noé.

Durante nueve días y nueve noches la lluvia los castiga y el agua llega hasta el Monte Parnaso a 2500 metros de altura. Sólo dos mortales se salvan en un arca (semejanza asombrosa con la historia del diluvio del Antiguo Testamento).


Mito de Zeus

Su influencia fue tan grande que los más grandes héroes griegos se consideraban pertenecientes a su linaje pretendiendo ser sus descendientes.

Para llegar al poder, Zeus libera a los cíclopes, a los cien brazos, y a sus hermanos olvidados e incluso sus cincos hermanos deglutidos por su padre y devueltos a la vida lo ayudan en su intento. Los cíclopes son los que le otorgan el poder del rayo.

Libran una batalla feroz y apocalíptica contra los titanes y Cronos, su padre, que es el símbolo del antagonismo ancestral entre padres e hijos.

Hasta cierto punto este acontecimiento pudo ser cierto en alguna medida y posteriormente haberse convertido en un mito, ya que un hecho aterrador tuvo lugar en la isla de Santorini hace tres mil seiscientos años, considerado el estallido más grande de los últimos veinticinco mil años. En 2006 se descubrió un yacimiento de cenizas volcánicas de enormes dimensiones que apoyan esta hipótesis.

La batalla entre Zeus y Cronos representa la lucha del bien y del mal. Los titanes utilizan a Tifón como arma mortífera, un monstruo surgido desde las entrañas de la tierra.
Sin embargo Zeus vence a Cronos y los titanes son arrojados al Tártaro por el volcán Etna.
Tifón permanece aún hoy en día amenazante en el fondo de los volcanes, y designa también la violencia del viento.